lunes, 10 de julio de 2017

Porqué leer a Jhon Taylor Gatto








Historia secreta del sistema educativo

Ante Prólogo para una edición costarricense.

 


El que suscribe estas líneas y se toma el atrevimiento de recomendarles la lectura de este libro es un padre de alumno que ha participado en decenas de marchas junto con los gremios de profesores y maestros a lo largo de años en defensa de la educación pública, aspirando a desfilar un día en defensa, no de la infraestructura, de los presupuestos o de las mejoras salariales, sino de los contenidos educativos que uno entendía que cada día eran mas mediocres y alejaban la educación pública de la que se impartía en colegios y escuelas privadas.

Soy por tanto un ciudadano muy crítico, tan crítico que algunos de los amigos docentes con quienes desfilaba, no dudaban en calificar mis opiniones  con la etiqueta fácil de “teorías conspirativas”.

A muchos de esos docentes les parecía exagerado e increíble que el sistema educativo fuera una herramienta que tenía el estado para ejercer una especie de ingeniería social al servicio del poder financiero y económico que está en la sombra del estado democrático. No podían imaginar que las pruebas de bachillerato por ejemplo fueran una herramienta en manos del ministerio para programar con ellas la deserción escolar que por otro lado se decía combatir. Y muchos empezaron a aceptar estas opiniones cuando al inefable Leonardo Garnier se le fue la mano y en la prueba de matemáticas del 2013 dejó por fuera al 85 % de los alumnos, viéndose obligado después a regalar ocho puntos para enmendar el error. Aquello era una evidencia clara de que las opiniones al respecto no eran tan descabelladas y la lectura del libro de Gatto, nos hará entender quienes toman esas decisiones y porqué.

 

Parece que es historia muy vieja los días en que don Pepe Figueres se decidió por la abolición del ejercito; un hecho histórico que lo puso a él y al país en el contexto internacional. Y debemos todos seguir sintiéndonos orgullosos por ello. Pero realmente lo que hizo Figueres y en alguno de sus discursos se deja entrever, fue cambiar un ejército de soldados por uno de maestros. ¿Y es esto tan loable? Pues la respuesta depende del punto de mira del observador. En los años cincuenta Centroamérica era una región extremadamente militarizada, donde las oligarquías  dominantes utilizaban a los ejércitos y a los dictadores para controlar y reprimir a los ciudadanos y sus aspiraciones de vivir en sociedades mas justas. En Costa Rica la abolición del ejército, significaba dejar esa tarea a los maestros para que la ejecutaran a más largo plazo. Para que reprimir con violencia a los ciudadanos si se podía programar a sus hijos con sutileza. ¿Cómo? La historia secreta del sistema educativo habla de cientos de formulas que se aplican casi de manera subliminal para conseguir una sociedad mas dócil y conformista. Figueres se referiría a los ciudadanos domesticados.

 

El Ministerio de Educación y quienes lo controlan con independencia del ministro de turno, han ido sofisticando sus sistemas y lo siguen haciendo para tener un mayor control de la sociedad y evitar así los cambios reales que cada vez parecen mas necesarios para volver a una Costa Rica mas justa y menos desigual como lo fuera no hace tantos años.

 

No hace mucho tiempo leí otro libro que no voy a recomendar, de Robert Kiyosaki, un gurú de las finanzas que ha coescrito con figuras como Trump. Sus libros son algo así como libros de autoayuda para hacerse millonario, y uno en concreto lleva el título conspiranoico de “La conspiración de los ricos”. Que un personaje relacionado con el presidente de USA hable de tal conspiración quiere decir que habla con conocimiento de causa. Los argumentos muy resumidos de Kiyosaki son que el 10% de la población mundial (los muy ricos) viven en el lujo mas increíble gracias a los negocios que hacen con la riqueza del 90% restante de la población mundial, manejando sus ahorros, sus impuestos y sus fondos de jubilación; y se pueden permitir eso, precisamente por la ignorancia de la mayoría de las personas incluidos notables profesionales que han pasado por las mejores universidades. Y todo eso porque la educación financiera es un tema tabú del sistema educativo, incluido el universitario, a no ser para las estudiantes de economía. Y lo es precisamente porque en esa ignorancia se sustenta el poder de quienes nos gobiernan.

 

En el caso costarricense, un ministro economista como Leonardo Granier que ha estado ocho años al frente del ministerio, ha querido dar un paso mas al frente de esa ignorancia programada de la que habla Kiyosaki y en su primer periodo, firmó un convenio, aún vigente, con el BAC Credomatic, para que profesionales de esa entidad financiera capacitaran a docentes que mas tarde impartirían a nuestros niños la materia de Educación para las finanzas. En el lenguaje coloquial sería algo así como dejar que el lobo cuide de las ovejas. En este caso las ovejas no son solo los niños sino también los profesores como quedó de manifiesto en la crisis que se presentó en el cambio de gobierno, cuando quedó en evidencia que el 90% de los educadores tenían comprometido su salario en pequeña y gran proporción, con instituciones financieras públicas y privadas y algunas del mismo sector de la educación. Pareciera el mismo 90% del que habla el gurú financiero.

A parte de este convenio hay otros vigentes que permiten la presencia el las escuelas y colegios de entidades comerciales como Mc Donald patrocinando actividades lúdicas; el Gringo Corner que le abre las puertas de las escuelas de la zona atlántica a la Embajada de USA, o los acuerdos con el Centro Cultural Sionista de Israel para que nuestros niños conozcan su versión del holocausto y de paso también del conflicto palestino.

 

La obligación de un padre consciente es estar al lado de sus hijos para tratar de contrarrestar lo que uno entiende que no es educación sino programación. Yo trato de hacerlo lo mejor posible pero entiendo que no todos los padres son tan conscientes ni tienen el tiempo para ello. Por eso apelo a que cada vez mas personas puedan apuntarse a esta causa.

 

Un programa de radio que escucho en internet tiene esta interesante cuña publicitaria: “Advertencia, escuchar Radio… puede alterar su percepción de la realidad”. Creo que John Taylor Gatto y Juan Leseduarte su traductor compartían esa intención como yo lo hago. Es por eso que trato de hacer llegar este libro al mayor número de docentes para que en algún momento se habrá el debate. Para que ese cambio que no ha de ser de siglas ni de colores sino de conciencia, se haga realidad.

La verdad nos hará libres.


Valentín Díaz